En una platica que camino por temas tan distintos pero
a la vez tan cercanos, fue como inicio mi plática con Jorge Moedano,
pintor que se expresa lejos de la teoría aprendida en las aulas y prefiere ser
cómplice de un aprendizaje autodidáctico.
En esta búsqueda, Moedano
encontró en ciertas fotografías de la inundación de Nueva Orleans -algo que a
muchos alarmaría- unos espejos de agua maravillosos, que
con su particular estilo transformo en verdaderas obras de arte.

La percepción de los detalles en estos cuadros, nos
permite asombrarnos demostrándonos que la belleza aparece en todo lugar, aun
después de una tragedia.

Queridos lectores, no dejen de maravillarse con esta
impresionante serie de pinturas, ni de
degustar los magníficos alimentos de este artístico café.
Gómez Farías #41-A Col. San Rafael, D.F.
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