El
teatro contemporáneo debe ser como un periódico abierto que exponga a los
espectadores collages de los problemas que agobian en nuestro tiempo a la
humanidad. El teatro no puede sustraerse al compromiso de sugerir al espectador
la crisis de hoy, los cambios en las ideologías, las diferencias entre las
generaciones,
Julio
Castillo.
Cuando eres invitado a una obra de teatro te imaginas
la constate de ir a ver a una obra de teatro en donde el espacio es completamente
definido, la interacción entre espectador y actor en muchas ocasiones es nula; aunque
te sientes maravillado nunca te sorprendes con este formato.
Por eso cuando fui convidado para la obra-ensayo Acciones sobre la fuerza de la debilidad (titulo bastante provocativo) En un espacio
tan diferente como lo es el sótano del
teatro Julio Castillo mi emoción y curiosidad eran inminentes. De la misma
manera que esta comunidad siempre ha buscado llegar a las entrañas de la música,
caminar por las entrañas de este tradicional teatro es una experiencia única.
La fuerza escénica de Silvia es apabullante,
deslumbrante y emocionante no es una sorpresa que haya sido invitada a
presentar este ejercicio teatral dentro del XXVII Edición del Festival
Iberoamericano de Teatro de Cádiz.
Los casi 20 minutos que dura son apoteósicos, el
magnetismo de Silvia nunca permite la distracción, a pesar de que no existe un
guion como tal jamás se pierde el contexto propio de lo que se quiere
transmitir, la interacción con el público es completa tanto que en ocasiones el
publico define el rumbo de este gran ejercicio.
Al final es tanta la pasión, emoción y energía que se
transmite no solo de parte de Silvia sino también del lugar y de la gente que
todo parece perfectamente mimetizado.
Les dejo un pequeño fragmento de este gran ejercicio.
Un agradecimiento enorme a Consecuencias en especial a
Patty Machorro.
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