FERIA INTERNACIONAL DEL GLOBO: Relato de una experiencia mágica en el cielo

Por: Montserrat Trejo Morales

Fotos: Verónica Sánchez Morales

Hace tiempo la experiencia de dar un paseo en globo aerostático era un plan por cumplir a largo plazo, hasta que se me dio la oportunidad de poder subir a uno y sentir esa mágica sensación de volar entre nubes y mirar la tierra en tan pequeña proporción. De ahí nace mi interés por asistir a un evento tan grande como lo es el Festival Internacional del Globo.

A continuación relataremos cada momento que vivimos dentro de esta experiencia.

Estuvimos preparando las mochilas además de la casa de campaña desde el sábado temprano  para salir por la tarde y llegar al espectáculo nocturno. Al salir de casa se nos olvidaron los cobertores para acampar, por lo cual tuvimos que regresarnos de medio camino por ellos; ya que no queríamos pasar frío en la

noche. Aprovechamos para traer un par de cobijas más.  Ya en el camino nos encontramos con mucho tráfico, como es de esperarse en nuestra ciudad; y para colmo ¡Se nos poncho una llanta en pleno tráfico! justo en la salida del periférico a la altura de la Av. Gustavo Baz. Obviamente tuvimos que orillarnos a cambiarla, afortunadamente íbamos lento y encontramos un espacio muy cerca para hacerlo. Después de cambiar la llanta y ensuciarnos las manos, porque aunque no lo crean es la primera llanta que ayudamos a cambiar. Por fin entramos a la autopista México-Querétaro y nos encontramos con varios tramos en reparación, como era de esperarse nos toco aun más  tráfico y mucho calor además nos encontramos con dos accidentes. También vimos una refinería entrando a Guanajuato, la cual se veía muy bonita desde lejos,  intentamos ir un poco más rápido para recuperar el tiempo perdido pero no fue posible por el tráfico.

También nos dimos cuenta de que la gente de los alrededores cruza las autopistas corriendo, ¡arriesgando su vida! ¡Qué  horror!

Como teníamos que comprar dos estradas para el FIG y pagar la estancia en el campamento, nos detuvimos en un OtzO –no queremos publicitar a nadie– cuando íbamos entrando a León, donde había muchísima gente comprando. Ahí encontramos a una persona que nos dijo que el acceso al Parque Metropolitano, sede de este maravilloso festival, para el camping solo era hasta las 8 pm por lo que decidimos ya no pagar la estancia del camping y comprar los boletos faltantes.

Ya eran casi las nueve de la noche, como ya era tarde decidimos buscar hospedaje pero no encontramos nada ni en un hotel de paso, todo estaba lleno, lo cual nos demuestra las miles de personas que asisten para presenciar el FIG. Decidimos cenar en un McBurguesa y terminamos yendo al lugar del evento, esperando que nos dieran acceso.

Ya en camino nos encontramos con más tráfico, justo cuando estábamos en la entrada mostramos los boletos y gafetes de prensa que amablemente nos proporciono Silvia de la Torre para poder hacer nuestra chamba, pero nos dijeron que ya no podíamos entrar porque ya no había lugar para quedarnos,

la persona amablemente nos comento: “Ni siquiera yo que soy del staff puedo entrar”. ¡No! Seguimos un poco más adelante esperando encontrar donde estacionar el auto. Afortunadamente a un par de cuadras encontramos lugar y preguntamos si podíamos armar nuestra casa de campaña para quedarnos allí, a lo que afortunadamente accedieron con su cuota respectiva, ¡claro! Las personas del lugar dijeron que se quedarían toda la noche cuidando los autos estacionados, que no teníamos nada de qué preocuparnos. Pasamos la noche muy bien en la casa de campaña.

Al día siguiente nos levantamos a las 5:45 para llegar a tiempo al evento, dejamos la casa de campaña armada para regresar después y con calma levantar.

Por fin entramos al evento, nos dividimos y buscamos la mejor vista, llegamos a el balcón de prensa; la vista era espectacular.  Cuando llegamos estaban comenzando el inflado de globos y de repente ¡bum! el lugar estaba lleno de globos inflándose, tomando forma y color. Es impresionante la magnitud de gente que asiste a este evento y los expositores que vienen de diferentes países presentando sus globos, increíbles. Las fotos obviamente no podían esperar.

El cielo comenzó a llenarse de todos esos colores formas y figuras; los búhos, el arlequín, el buzo, Yoda y Darth Vader de Star Wars, unas ballenas, un angry bird, un looney toon, el soldadito, la cara de Mickey Mouse, la pecera, el dinosaurio saliendo del huevo, un Bob Esponja, una coca-cola, el reloj,  además de globos de los patrocinadores del evento en formas tradicionales, realmente un gran espectáculo, que no podíamos perdernos.

Mientras en el escenario comenzaba la presentación de un concierto, que es un plus para todos los asistentes ya que el FIG organiza grandes espectáculos para divertir a todos los asistentes, sin embargo decidimos salir a desayunar y nos encontramos con unas quesadillas y atole. Después fuimos a levantar la casa de campaña y nos dirigimos al la zona de mercados de piel, no podía faltar, en nuestro viaje a esta maravillosa ciudad. Y bueno nos encontramos con más tráfico, fuimos de compras, muy bonitas cosas a muy buen costo. Finalmente pasamos a comer, terminando nos dispusimos a regresar a casa.

El regreso fue mucho más rápido, prácticamente el tráfico nos toco en la salida de León, ya tomando la autopista fue súper rapidísimo.

El FIG ha sido una de las experiencias más gratificantes;  el ver y admirar los cientos de globos en el cielo, es como descubrir un mundo de colores y formas.  ¡Al estar cerca de ellos y verlos inflarse y subir es fascinante!

Ver a tanta gente en el evento es emocionante,  saber que este tipo de eventos invita a familias y amigos a disfrutar de un hermoso paisaje y un espectáculo inigualable.

¡Los globos aerostáticos están llenos de una magia especial!

¡Agradecemos el apoyo de Silvia de la Torre y a todo el equipo del FIG!